MORDER EL POLVO. La rastreadora Honda CB400 'Barrel of Death' de T.Jasin Motorcycles

Escrito por Andrew Jones

‘Máxima retro’. Ese fue el resumen de Tomek para sí mismo. Y como el único miembro de T.Jasin Motorcycles de Varsovia, seguro que no iba a ser anulado. Habiendo eludido el estilo de muchas de sus construcciones recientes, claramente decidió hacer todo lo posible para ver qué podía lograr. Nombrando la moto en honor al espectáculo de circo de motos de la vieja escuela, su Honda CB400 ‘Barrel of Death’ ha superado muchos más niveles que solo uno retro.

Sin una pizca de pretensión de desmentir su impresionante catálogo de construcción, el constructor se presenta. “Hola, soy Tomek de Varsovia, Polonia, y me gusta construir bicicletas antiguas personalizadas. La moto que he elegido esta vez es una Honda CB400 clásica de 1978 con su motor bicilíndrico muy fiable”. Este modelo en particular fue importado de los EE. UU., quizás inspirando un poco a Tom en sus objetivos retro. “Esta vez decidí construir una bicicleta con un estilo ‘retro máximo’. Aparte de esto, la principal inspiración para el proyecto fue la simplicidad clásica y la alta calidad”.

“Desarmé la bicicleta hasta el último tornillo y planeé minuciosamente la construcción. En segundo lugar, limpié todo. En tercer lugar, los limpié de nuevo”. Con las piezas más brillantes que el equipo quirúrgico de un hospital, Tom volvió a trabajar y limpió el cuadro antes de centrar su atención en las hermosas ruedas con radios de la bicicleta y el tambor de freno delantero a juego. “Es la primera vez que veo estas ruedas en una Honda CB con mis propios ojos; Los combiné con un nuevo juego de neumáticos Shinko clásicos”.

A continuación, Tom cambió el tanque original por una unidad MX vintage más pequeña que estaba pintada en colores grises y rojos apagados y rematada con el logotipo de una tienda. Con un gris mineral a juego elegido para el color del marco, se obtuvo un nuevo asiento con cuero negro con costuras rojas a juego. “En algunas partes, mezclé colores dorado, negro y plateado por algún interés visual. Luego se instaló un conjunto agresivo de manubrios y un guardabarros trasero de plástico esbelto.

“Cada parte personalizada de la motocicleta fue hecha a mano, hasta los carenados laterales de aluminio, los escapes cortos, las placas de aluminio perforadas y la pintura. Pero para andar en bicicleta en la calle, necesitaba poner las placas y luces legalmente requeridas en algún lugar. Al final, monté un nuevo faro negro en la parte delantera y coloqué las placas y sus componentes eléctricos asociados en la parte trasera izquierda de la moto”.

Los otros detalles geniales de Tom incluyen frenos Honda renovados, instrumentos modernos (y mucho más simples) y un asiento hecho completamente desde cero. “Desde el principio hasta el final, lo hice todo excepto hacer el cuero en sí. Estoy muy feliz con los resultados.” Y no es el único.

Pero la navegación no fue tan tranquila; La historia de Tom sobre la compra de la bicicleta sugiere que hubo algo de emoción involucrada. “Reviso la mayoría de los sitios web de motocicletas en Polonia muy a menudo, pero esta es la primera vez que veo una Honda como esta. Mi decisión fue simple: ¡tenía que tenerla!”. Y para una compra impulsiva, estaba en condiciones bastante decentes, necesitando poco más que un servicio regular para reemplazar los consumibles. “Toda la electricidad funcionó bien. Así que le puse un poco de aceite nuevo, bujías NGK, filtros y una cadena”.

[supercita] “Reviso la mayoría de los sitios web de motocicletas en Polonia muy a menudo, pero esta es la primera vez que veo una Honda como esta. ¡Tenía que tenerlo!”[/superquote]

Sintiendo que Tom no estaba siendo completamente abierto con nosotros, lo interrogamos para ver si había algo en lo que se estuviera ocultando. “Cuando se trata de reelaborar los cuadros de mis bicicletas, lo considero una de las partes más importantes de toda la construcción. Si quieres una bicicleta con la forma perfecta, necesitas un cuadro perfecto. Pero no me preguntes cómo; las proporciones son mi pequeño misterio”.

Pero, ¿cómo va? Si bien no se han realizado modificaciones trascendentales en el motor, hay suficiente pulido para ver aproximadamente 40 ponis en las ruedas traseras. “El rendimiento de la bicicleta está a un nivel similar al del resto de la construcción”, señala Tom. “Nada es exagerado, pero todo se ha hecho al 100%”.

¿Alguna idea de despedida, señor Jasiński? “Al final, la moto se ve exactamente como yo quería. Cuando manejo la Honda, la gente me da el ‘buen pulgar’. Este es el mejor premio para mí”. Buen pulgar, de hecho. Y si bien ese es el mejor premio de Tom, probablemente estará de acuerdo con nosotros cuando decimos que tomaríamos la bicicleta cualquier día de la semana.